Para que un ramo de flores dure más, debes . Evita la luz solar directa, corrientes de aire y fuentes de calor. Elaboración: Corte en ángulo: Al cortar los tallos en ángulo (aproximadamente 45 grados), aumentas la superficie de absorción de agua y evitas que los tallos se asienten completamente en el fondo del florero, lo que puede obstruir la absorción. Remover hojas sumergidas: Retira las hojas que se encuentran por debajo del nivel del agua, ya que pueden descomponerse y favorecer el crecimiento de bacterias que dañan las flores. Florero limpio: Limpia el florero a fondo antes de colocar las flores para evitar la proliferación de bacterias. Cambio de agua: Cambia el agua del florero cada 2-3 días para evitar que se estanque y se contamine. Conservante floral o remedios caseros: Agrega conservante floral, bicarbonato de sodio, azúcar o jugo de limón para ayudar a mantener las flores frescas y evitar la proliferación de bacterias. Evita luz solar directa y calor: Coloca el ramo en un lugar fresco y sombreado, lejos de la luz solar directa, corrientes de aire y fuentes de calor.